Tomás Berard

Durante su maestrazgo estalla la guerra comercial entre las ciudades italianas de Venecia y Génova, poseedoras de importantes factorías en Oriente. El Temple intentó mantenerse neutral pero por circunstancias acabó inclinándose por Venecia. Al principio de la jefatura de nuestro protagonista se llevó a cabo un asalto naval sobre la ciudad de Acre por parte de 50 navíos Genoveses. Los venecianos y pisanos temerosos de que los Genoveses de la ciudad o sus aliados (por ejemplo los Hospitalarios) entrasen en sus barrios y cometieran alguna barbaridad no osaban plantar cara a los atacantes que continuamente lanzaban artefactos sobre la ciudad, por lo que por mediación de Juan de Ibelin, Conde de Jaffa, los templarios asumieron la defensa de esos barrios, sin que nadie se atreviese a violarlos.Es la época de más invasiones mongolas, en este caso de Hulagu Khan, más concretamente su general Kitboga que toma Damasco y se dirige a Egipto donde Baybars lo detiene y contraataca recuperando la capital Siria. El mameluco retoma la lucha contra los reinos cristianos, tomando Cesarea, Arsuf, Safed (zona templaria), Beufort (fortaleza templaria), Banyas, Jaffa, Antioquia... En esta última estaba el castillo de Gastein de donde los templarios tuvieron que huir al ser totalmente imposible su defensa para refugiarse en el de La Roca Guillaume, al que también abandonaron después de recoger lo importante o destruirlo. Los estados latinos sin dinero y envueltos en estúpidas luchas internas, poca resistencia podían ofrecer.De este periodo es el primer enfrentamiento serio que tendría la orden con los Papas. El Papa había excomulgado y cesado al mariscal del Temple Esteban de Sissey. Pero con el apoyo del Gran Maestre no acató la decisión, aunque posteriormente con el siguiente Papa llegaría la reconciliación y la asunción del mandato papal, con la consiguiente resignación del mariscal. Es posible que en este conflicto hubiera motivaciones políticas, como una crítica al papado por primar la guerra lombarda, en Italia sobre la de Ultramar, o bien militares, alguna derrota poco honrosa o incluso cuestiones de mujeres.La dejadez de Roma y de Occidente en general, así como la intensidad emocional que los templarios ponían en su particular gesta en Tierra Santa pudo llevarles a prácticas extrañas como renegar de Dios y de Roma por dejarles abandonados ante un enemigo tan poderoso y numeroso. Quizás entonces se volcasen en el culto a la Virgen, que nunca abandonarían.
Pues nuestra señora fue el principio de nuestra religión (orden), y en ella y en su honor estará si Dios quiere el final de nuestras vidas y el final de nuestra orden, cuando dios quiera que así sea.
La influencia de San Bernardo como vemos es muy fuerte.En 1270 San Luis (Luis IX) se embarca en otra cruzada y desembarca en Túnez, lo que obliga a Baybars a detener su avance en el norte para hacerle frente. Precaución innecesaria ya que el monarca francés moriría víctima de la enfermedad del tifus. Baybars posteriormente toma el Castillo Blanco de los templarios y el famoso Krak de los Hospitalarios. En 1273 moriría Tomás Berard considerado por algunos historiadores como el Maestre que corrompió la orden con la herejía. Su enfrentamiento con Roma y la situación dramática en la que se encontraban los practicantes de la supuesta verdadera religión en Oriente quizás inclinó a los responsables de la Orden a replantearse sus postulados y modos de actuación.